La
complejidad del estudio de la conducta humana sugiere la necesidad de utilizar
todos los medios que tengamos a nuestro alcance. El mismo termino de
psicobiología hace alusión a la agrupación metodológica de diversas ciencias en
la realización de tales estudios. Sin embargo, este deseo conlleva diversos
problemas:
I. -
Problemas de coordinación entre tales ciencias.
El uso de
diversas ciencias con escasa coordinación o con ajustes limitados adquiere un
tipo de enfoque científico que podemos definir como multidisciplinar. Una
definición de tal proceso lo podemos ver en Wikipedia: La multidisciplinariedad
es una mezcla no integradora de varias disciplinas en la que cada una de ellas
conserva sus métodos y suposiciones sin cambio o desarrollo de otras
disciplinas en tal relación científica.
Los
autores implicados en una tarea multidisciplinar adoptan relaciones de
colaboración con objetivos comunes, pero su fin no incluye una correcta
adaptación de todas ellas. El
problema es estudiado desde varias disciplinas, pero las conclusiones de cada
una de ellas pueden o no conectar con los logros obtenidos por las demás. Un
buen ejemplo lo tenemos en diversos libros en los que diversos autores exponen
sus teorías y estudios sobre un tema (p. e. Evolucióndel simbolismo humano) sin que exista una coordinación articulada en busca de
unas conclusiones comunes. Sus estudios son multidisciplinarios, pero las conclusiones son
independientes. Esto nos indica la necesidad de avanzar
en el desarrollo y utilización de nuevas formas de trabajo que nos permitan
alcanzar resultados mínimamente coordinados, pues todas las ciencias tienen un
mismo fin (el estudio de la conducta humana).
En este
sentido, aparece el concepto de interdisciplinariedad que se entiende como la búsqueda sistemática de integración
de las teorías, métodos, instrumentos, y, en general, fórmulas de acción
científica de diferentes disciplinas, a partir de una concepción
multidimensional de los fenómenos, y del reconocimiento del carácter relativo de
los enfoques científicos por separado. Como es lógico, este segundo método
de análisis científico es mucho más difícil de obtener que el multidisciplinar.
Parece necesario pasar antes por la etapa multidisciplinar, pues presupone
tomar correctamente las nociones pertenecientes a otros ámbitos para que sean
realmente operativas en ellos. Sin embargo, la intromisión de una ciencia en un
ámbito específico no implica el conocimiento de las diversas teorías que sobre
tal u otro asunto de esta disciplina puede haber podido desarrollar. Esto
ocurre en todas las ciencias aplicadas, siendo uno de los casos más llamativos,
por explicar la evolución de la conducta de formas totalmente diferentes, el de
la Psicología, donde existen diferentes tendencias usadas por la Arqueología
(p. e. Psicología evolutiva;
Psicología cognitiva por procesamiento de la información).
Actualmente,
se ha desarrollado un nuevo concepto sobre interdisciplinariedad de las
ciencias, denominado como la transdisciplinariedad y concebido como un principio para la
unidad del conocimiento más allá de las disciplinas. La transdisciplinariedad
es radicalmente distinta de la interdisciplinariedad. La interdisciplinariedad
desborda las disciplinas pero sus objetivos aún permanecen en el seno de la trama
de las investigaciones disciplinares. Sin embargo, la transdisciplinariedad
implica aquello que está al mismo tiempo entre las disciplinas, a través de las
diferentes disciplinas, y más allá de cada disciplina individual. La
transdisciplinariedad implica la dinámica engendrada por la acción de varios
niveles de la Realidad a un mismo tiempo. Con este enfoque todo objeto
de estudio o actividad humana no se compartimenta dentro de una disciplina
determinada, sino que se asume su naturaleza plural que abarca a diferentes
ramas científicas, siendo necesaria la exploración de todas ellas, con la
intención de vencer todas las trabas convencionales y alcanzar un mejor
conocimiento de nuestro mundo. Si la interdisciplinariedad era difícil de
lograr, esta tercera vía de estudio supone un grado de dificultad mucho mayor,
así como una concepción científica poco desarrollada en nuestros medios
académicos.
II - Qué
ciencias utilizar.
La simple
aceptación de ciencias como la Neurología, Psicología, Sociología, Demografía,
y Lingüística como parte fundamental de los estudios sobre el comportamiento
humano es el inicio de los problemas de la propia interdisciplinariedad y,
muchas veces, la causa de la elaboración de unas buenas intenciones pero
escasos logros integradores. Hay que tener en cuenta que la integración teórica
y práctica de estas disciplinas es el camino para indagar en el cómo y porqué
del origen, cambio y evolución cultural y cognitiva. Estas ciencias parecen
suficientes para el fin que se persigue, pero adolecen de dos omisiones
teóricas que obstaculizar la realización de una profunda interdisciplinariedad
(Rivera, 2009):
-- Siempre
se ha estudiado al ser humano reciente y en medios culturales actuales tanto los considerados avanzados como
primitivos, pero todos con un lenguaje, simbolismo elaborado, alto grado
de socialización, etc. Estos avances cognitivos y culturales no han existido
siempre en nuestra especie, por lo que ha habido que crearlos, simbolizarlos,
transmitirlos y guardarlos a lo largo de toda la existencia del género Homo.
La realización de tales procesos se realizó en el paleolítico, y las
condiciones en que se produjeron sólo podemos conocerlas por medio de la
Arqueología, la cual se dedica a analizar el dónde y cuándo de la
producción de tales cambios conductuales. Así, parece imprescindible la
utilización de las ciencias que estudian a los seres humanos en todo su linaje
(Arqueología, Paleoantropología, Antropología cultural, etc.).
--
Paralelamente, los mecanismos evolutivos no ofrecen de manera innata la
producción de tales progresos cognitivos, por lo que conocer la forma en que se
produjo la evolución neurológica en nuestro género parece fundamental en la
comprensión de la conducta humana. La Biología evolutiva y Genética deben
acomodarse entre las ciencias que utilizaremos en nuestros estudios
interdisciplinares.
Ni el
prehistoriador suele conocer los fundamentos psicobiológicos del ser humano
relacionados con la conducta, ni los psicobiólogos conocen la realidad
conductual de los homínidos del paleolítico, y puede que ninguno conozca y use
los mecanismos del cambio morfológico en la evolución como causa de las
características psicobiológicas del linaje humano. Sin un mínimo conocimiento
de todas estas disciplinas es muy difícil la armonización de sus contenidos,
hecho que facilitaría el desarrollo de teorías mejor fundamentadas. Esto nos
lleva muy lejos, pues implicaría la necesidad de cierto conocimiento sobre las
ciencias que van a formar la interdisciplinidad científica, lo que muy pocas
veces se cumple por la enorme complejidad académica que conlleva.
Parece
claro que toda interpretación realizada bajo una amplia y adecuada coordinación
científica tendría más posibilidades de disminuir la subjetividad que impregna
muchos de los trabajos principalmente humanísticos, pero también puramente
psicobiológicos (p. e. lenguaje, conciencia humana, etc.). Pero debe existir un
requisito fundamental en toda síntesis interdisciplinar, pues inexcusablemente
todas las ciencias que se utilicen deben tener unos fundamentos teóricos que no
sean antagónicos. Si en esta confluencia de ciencias existiesen contradicciones
teóricas, habría que pensar que alguna o varias teorías de las disciplinas
usadas pudiera no ser correcta, pues en la explicación de la conducta humana no
pueden coexistir conceptos generales claramente opuestos. Por supuesto, los
datos arqueológicos no sólo deberían estar de acuerdo con las tales
conclusiones teóricas, sino que la mayoría de las veces serían una guía del
camino que la evolución cultural
y cognitiva desarrolló en cada periodo y lugar histórico.
Por todo,
creo que la interdisciplinariedad académica es un método científico
imprescindible en la actualidad, por lo que debe expandirse y facilitarse en
los medios académicos, no sólo para su realización sino para su comprensión por
parte de la propia sociedad en general.
* ANDREW, L. y CHARLES, R. P. (Ed.) (1996): Editorial
introduction to Part III: “Ontogeny: symbolic development and symbolic
evolution”. En Handbook of Human Symbolic Evolution. Clarendon Press. Oxford.
* RIVERA, A. (2009):
Arqueología del lenguaje. La conducta simbólica en el Paleolítico. Akal. Madrid.
La crisis, a la que relaciono con la problemática del lenguaje, se puede entender como una crisis de los fundamentemos económicos, tecnológicos, científicos, culturales, lingüísticos, en que se basan todos los lenguajes del progreso y el desarrollo científico cultural etc. de nuestros estado económicos.
ResponderEliminarSin lenguaje no podríamos, por ejemplo tener historia, ni ir y proyectarnos más allá del mundo dado en lo real, como progresando y desarrollándonos sobre él, a costilla de él, más allá del lenguaje en que se produce y manifiesta, y constituye la complejidad de lo real.
Como lo es la realidad biológica, dada y sostenidas por el lenguaje en el que se dan las plantas, los insectos, los seres vivos y todos los micros organismos, que se dan a la realidad, a la organización biológica material de la acción y sustentación de un mundo visible, concebido animado por tal gramática.
Que no queramos aceptar, ni reconocer, el lenguaje en que se da el mundo real, no nos ha impedido, que como un bicho imaginario, no nos creáramos un lenguaje propio, a la altura y medida de nuestras “dudosas” intenciones y objetivos. Para mentirnos, cagarnos y jodernos de lo lindo la vida, con todas las patrañas, las fabulas, los cuentos, que nos inventamos a partir de tal cosa, tal posibilidad de construir y exportar , sostener y hacer vivir, como dar a experimentar y a compadecer a otros, nuestros lingüísticos imaginarios, mundos particulares y colectivos, como creados por el manejo consciente de nuestro arte ilusorio, que muchas veces hacemos pasar y pesar como verdaderos mundos reales que existen y se sostiene mas allá de toda duda, al margen de lo real.
La formación de la cognición humana depende de las características del medio ambiente (social, económico, lingüístico, tecnológico, etc.) en el que nace y se desarrolla. El lenguaje es un elemento clave en el desarrollo de las cognición humana, dependiendo de las características que contenga. De él aprendemos todo lo que la sociedad nos puede aportar, lo bueno y lo malo. A lo largo de nuestra historia como especie se han ido creando y simbolizando multitud de conceptos abstractos que nos trasmiten generacionalmente por medio del lenguaje. Creo que la información global y no sectaria es la que nos puede hacer comprender mejor la realidad de las cosas.
ResponderEliminarUn cordial saludo de:
Ángel Rivera
Es evidente que el factor mental, la capacidades de la acción mental de actuar, genera cambios y alteraciones, del y sobre las condiciones del medio, por lo tanto sobre la vida de los individuos, implicados y dependientes de ese medio.
ResponderEliminarPor medio precisamente de lo que denomino como el actuar de la acción mental, muy a largo plazo, por sus construcciones, objetos, es a lo que considero más precisamente como algo esenciales, de atinar a descubrir y comprender en profundidad.
Yo se que seguir, rastrear, descubrí, la acción de algo, que no se puede sostener en la manos, ni dar en la observación en algo, y que actúa a través de las cosa, es algo difícil.
Mas fácil es pensar y creer que todo radica, pasa se reduce a la comprensión objetiva espacial y estructural de la complejidad cerebral, que es una opinión objetable de mí pensar, también es objeto de la acción y los objetos productivos, por medio de los cuales se manifiesta, y actúa la intangibilidad de la acción mental.
Pensar en el cerebro y su estructura pude ser más simple que pensar en todas las cosas que lo hacen funcional, es decir en todas aquellas cosa no limitadas a la sola actividad cerebral, acciones múltiples que en parte se traduce a la estructura, en tanto que a la compleja actividad en que sostiene la funcionalidad cerebral en forma operativa.
Es como pensar en la estructura del árbol y no pensar en toda la acción productiva que se da por medio y a través del árbol, a través de la acción del agua, las lluvias, los minerales, la luz, los insectos, los vientos, los micro organismo de la tierra, el clima, la composición del suelo, etc., es decir que la acción de la vida-muerte no se limita a la estructura del árbol, que como acción va y sigue actuando existiendo y conservándose como acción, más allá de la vida-muerte o no del árbol, aunque es parte de la actividad y la vida productiva y constante del árbol.
El árbol por ejemplo es una forma, estructura biológica por la que se manifiesta difunde la acción de la vida, por medio y mas allá del árbol, y un submarino nuclear es una forma, estructura mental por la que se manifiesta y difunde la acción de la mente, por medio del submarino y más allá del submarino.
ResponderEliminarPara mi intentar comprender la acción de la mente, con todos sus procesos y fenómenos cognitivos, por la sola consolidación del estudio de la estructura del cerebro, es como intentar comprender la acción de la vida, la del agua, la de la luz, por la sola observación y estudio de la estructura del árbol.
Es como priorizar en la estructura y la acción productiva del cerebro y no en la del hígado, la del corazón, la de la circulación de la sangre para mantener y obtener oxigenado mis sueños, el habla y el pensamiento. Yo como ser viviente me puedo reducir a la estructura del cerebro a la del cuerpo, y este es un acto arbitrario ya que se, si bien que no me puedo sostener vivo, sin la acción del cerebro, la del cuerpo, tampoco me pude sostener vivos sin la acción gravitatoria del campo terrestre, ni la acción fecundadora de los vientos, los insectos y el oxigeno etc. Es una arbitrariedad mental definir y pensar que la vida, la acción viviente de mi cuerpo, empieza y se reduce a la sola acción como arbitrariedad de mis ideas y pensamientos.
Ahora estimado amigo, lo que sospecho, especulación mental filosófica, es que la acción de la mente, se ha independizado y diferenciado de la acción de la vida, y que en tanto esto, esta actúa como una acción independiente, por medio de sus estructuras, instrumentos, objeto como los del lenguaje, una invención mental para la acción mental, que procura el dominio y la explotación de la vida, en tanto que por medio de los cerebros, de los hombres, por medio de los que actúa, se manifiesta, se expande en su acción, contra la acción total de la vida terrestre hasta el presente. En tanto el cerebro es tan victima como la vida de un niño desnudo mendigando por la sobrevivencia en la calle, de la acción productiva de la mente.
Ahora ante todo esto, este panorama no muy halagador, como mediadores y portadores de la acción de dos fuerzas, fuentes aparentemente de conocimiento, en clara contradicción y antagonismo, situación que se da por medio de nuestra especie, creo que nos encontramos en un punto crucial de distanciamiento máximo entre las misma, en virtud de la emergencia de lago absolutamente extraordinario, e inimaginable.
No sé si aporto algo a la situación, o la oscurezco desde una mera actividad marginal y reflexiva.
Un saludo y gracias por un espacio con contenidos relevantes.
Cuando de habla de las capacidades cognitivas humanas se hace referencia a una parte de las funciones que el cerebro puede realizar, pero nunca se piensa que es un “algo” independiente del resto del cuerpo y del medio en el que vive. El cerebro es el gran coordinador de la fisiología corporal y de la relación del ser humano con el medioambiente con el que constantemente estaría interactuando. Forma un todo, donde la parcelación de sus funciones es consecuencia de nuestra racionalización científica para poder estudiar mejor sus funciones, pero es una realidad psicobiológica única, y como tal hay que estudiarlo. Este es el camino del Estructuralismo que utilizo. Si no tenemos conceptos dualistas respecto a la mente humana (de ser así es una cuestión de fe y no hay nada que discutir ni comentar) debemos de pensar que es en el cerebro donde se producen los procesos que marcan nuestra forma de ser y conducta, pero no de forma aislada, sino en intima relación con el cuerpo que le proporciona toda la información que es capaz de procesar del estado biológico de nuestro cuerpo y del medio del que vivimos. Todo forma un todo.
ResponderEliminarEn este contexto, los estudios interdisciplinarios se muestras necesarios, pues con solo conocer la estructura cerebral es muy difícil comprender los procesos cerebrales que regulan nuestra conducta. La parcelación académica no nos favorece, por lo que hay que atender a todas aquellas ciencias que estén implicadas en la formación evolutiva y ontogénica del cerebro (Biología evolutiva, Genética, Embriología), del funcionamiento neurológico como órgano de nuestro cuerpo (Neurología), de los procesos cognitivos que podemos observar en la conducta humana en todas sus edades (Psicología), y de la gran importancia que tiene para el desarrollo cognitivo y conductual los factores sociales (Sociología) y lingüísticos (Lingüística, sobre todo neuro y psicolingüística). Todas esta ciencias debidamente interrelacionadas nos dan un modelo psicobiológico de la forma en que se produce la conducta humana. Tal modelo, siempre en constante reconstrucción, nos ofrece unos fundamentos basados en la interdisciplinariedad de todas estas ciencias, teniendo un nivel de certeza mayor del que pueden tener por separado cada una de tales ciencias. Este es modelo que ofrezco y es mi criterio de la realidad de la conducta humana.
Totalmente de acuerdo Ángel : apoyo tu planteamiento, sobre la increíble complejidad de la interacciones entre todas las cosa y todos los atores. Para la que es necesaria la interdisciplinaridad y la transdisciplinaridad, y lo que venga en cuestión, para atinar a comprender en algo, la belleza operativa de la complejidad de tales fenómenos. Y más aun en estos días de tantas tenciones y desequilibrios estructurales y operativos, entre los sistemas sociales y culturales, ecológicos y económicos, en la que nos encontramos.
EliminarUn abrazo.